Tras la muerte del Emperador Zhengde, la ahora ex-concubina Shao Jun es rescatada por los Asesinos y a partir de allí ella dedica su vida a la Orden. El sucesor del emperador ordena la aniquilación de todos sus enemigos, incluyendo los Asesinos, por lo que la joven guerrera huye junto a su mentor hacia Italia para encontrarse con Ezio Auditore. Un par de años después, Shao Jun regresa a su nación para cobrar venganza contra aquellos que acabaron con sus hermanos.